Érase un hombre a un smartphone pegado,
érase un smartphone super laptop,
érase un smartphone medio desktop,
érase casi un mainframe recortado.
Era un reloj de sol jibarizado,
érase una Olivetti reducida,
érase un monolito boca arriba,
era von Karajan smartphonado.
Érase el conductor de una ranchera,
érase un jeroglífico de Egipto,
los doce modelos de smartphones era.
Era un smartphonísimo infinito,
Más que smartphone, ya tableta tan fiera
que en la oreja de Jobs fuera delito.
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Un soneto rescatado para celebrar el #DiaMundialDeLaPoesía 2021. Alguno encontrará un cierto parecido con un soneto clásico, uno de esos que antes leían en clase los profesores de literatura aburridos.
Imagen: Incapaz de localizar la fuente original. Muchos citan a Santiago Vecino, que parece repostear una imagen de Stan Winston School (??). En Reddit se discute como el triunfo del alien abrazacaras (facehugger). Esperando la «democratización» del token no fungible.
Brillante!
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